Si hay una casa de cigarros que fumemos habitualmente en este club y que nos genera un cierto cabreo es ésta: AUGUSTO REYES. ¿Y por qué de ese cabreo? Pues porque tiene unos cigarros calidad/precio excepcionales y desde hace años ya no se producen.
Desde la cata del AUGUSTO REYES Emperador Robusto hemos descubierto que la familia Reyes sigue haciendo puros. Siguen siendo un referente en el mundo del cigarro dominicano y es la quinta generación (Augusto Reyes), responsables de mantener la tradición, junto a la transgresora sexta generación, en este caso la primera mujer tabaquera de la familia (Nirka Reyes), quienes le han dado un giro completo a la casa para refundarse en 2012 como: DE LOS REYES CIGARS, con marcas como SAGA, DON JULIO, DEBONAIRE y PATORO (que en breve probaremos en este club).
Como ya os contamos en la cata del AUGUSTO REYES Emperador Robusto, los cigarros que seguimos comprando, catando y disfrutando deben de contar ya con cerca de 8 años de añejamiento en cava (nuestra amada Cava de Boadilla) lo que, unido a la política que tenía Augusto Reyes Jr. (tataranieto del fundador de homónimo nombre) de envejecer los tabacos 3-4 años en paca, nos da unos tabacos excepcionales por precios de broma (este robusto está por debajo de los 3,50 euros).
En el caso de hoy es el AUGUSTO REYES Gran Cru Robusto el elegido para disfrutar de una buena fumada tranquilamente en la piscina, el calor de Madrid de estos días derrite a cualquiera y un buen baño es la mejor solución.
El cigarro cuenta con una excelente presentación, como todos los puros de la casa, aunque en este caso el color de la anilla, violeta y plata, no nos convence en exceso. De color maduro, la capa pese a ser aceitosa y suave presenta alguna macha y se observa perfectamente la nervadura.
El tacto es bueno y el encendido y corte fáciles. Las primeras caladas nos muestran un cigarro muy terroso, con toques amargos de cacao y café tostado; la mezcla es realmente rica y se dirfuta en un cigarro de fortaleza media.
Cuando llevamos unos minutos fumando nos encontramos con un problema, más nuestro que del cigarro, y es un exceso de humedad. Seguramente un humidor con exceso de agua (con el calor del verano igual lo hemos rellenado de más por miedo a que se sequen nuestros puros) nos ha llevado a que el cigarro no se consuma por igual y a tener que corregirlo en un par de ocasiones. Lo bueno es que es un cigarro que hemos fumado en varias ocasiones y sabemos que no es problema de éste sino nuestro.
El segundo tercio sigue terroso, algo amaderado y, sobretodo, salado. La fortaleza sube y desaparece los matices de café; la evolución es positiva pero no cabrea que el exceso de humedad nos haga esforzarnos de más para llenarnos la boca de humo. La ceniza es relativamente consistente y muy blanca, con un humo no es excesivamente denso pero si muestra con un rico aroma que acompaña muy bien la fumada.
El último tercio baja la terrosidad, sube la madera y desaparece por completo los toques salados para cambiar hacia un final dulce en el cigarro.
Desde aquí sólo os podemos decir una cosa: si tenéis la suerte de encontrarlos, no dejéis pasar la oportunidad de comprarlos; son toda una joya. Gran cigarro de una de las familias tabaqueras con más solera de República Dominicana.
Características:
- Vitola: Robusto (5×54)
- Origen: Republica Dominicana
- Precio: 3,40 euros
- Tiempo de fumada: 40-60 minutos
- Capa: Dominicana
- Capote: Dominicano
- Tripa: Dominicana (Piloto Cubano y Criollo 98)
Valoración del club:
- Tiro: 7,5/10
- Prensado: 7,5/10
- Sabor primer tercio: 7,5/10
- Sabor segundo tercio: 8/10
- Sabor tercer tercio: 8/10
- Ceniza: 7,5/10
- Humo: 8/10
Opinión general: 7,7/10
Hola,
Teneis idea de donde puedo encontrar los A. Reyes, en Barcelona ?
Gracias !
Me gustaMe gusta
Ni idea Juan, llevan ya muchos años descatalogados, ahí es cuestión de suerte…
Me gustaMe gusta
Muchas gracias, y felicidades por este fantástico blog !
Me gustaMe gusta